En los últimos meses, sobre
todo desde que la administración de Miguel Díaz-Canel comenzó a abrir mástiendas en dólares, las denuncias en redes contra la tala indiscriminada de
árboles en las ciudades y pueblos del país de han hecho más habituales, al
punto que a los medios de comunicación del régimen no les ha quedado más opción
que tratar de darle una explicación a esto.
Según un artículo publicado recientemente en el diario oficialista Tribuna de La Habana, la tala de estos árboles se debe a que cuando fueron sembrados, hecho que en la mayoría de los casos ocurrió antes de que los Castro instauraran su dictadura, no se usaron las especies más adecuadas de la flora para el arbolado urbano.
Ahora bien, como es sabido, con
el castrismo una cosa es la versión oficial y otra muy distinta la verdad, pero
para eso aquí estamos nosotros.
La realidad detrás de esto es que el castrismo está atravesando por su peor momento y necesita toda la divisa que le sea posible obtener, por eso, como bien se anuncia en el titular de este artículo, es que el régimen ha estado talando los árboles, con el objetivo de que los cubanos pasen más calor, algo que debe empeorar en los venideros meses de julio y agosto, y se vean en la necesidad de comprar aires acondicionados, lo cuales en estos momentos solo están disponibles en las tiendas en dólares.
Y, como para matar dos pájaros de un tiro, la administración de Miguel Díaz-Canel se aseguró, antes de intensificar la tala de árboles en las ciudades y pueblos, de subir el costo del consumo eléctrico, o sea, que el que no pueda comprarse un aire acondicionada, va a tener que quitarse el calor con un abanico, porque hasta con un ventilador le van a sacar el dinero.