Por Charly Menéndez Castillo
Un grupo de cubanos residentes en La Habana le celebró este sábado el cumpleaños número 18 a uno de los bache más grandes que tienen el país.
Si bien a cualquier extranjero que escuche hablar de este acontecimiento le puede parecer algo absurdo, entre los cubanos este tipo de celebraciones cada vez son más frecuentes, al punto de que muchos expertos consideran que dentro de unos años ya pasarán a formar parte del acervo cultural de la nación.
Al respecto de esta celebración varios de los vecinos conversaron con nuestra revista, y aprovecharon la oportunidad para hablarnos sobre un movimiento que se está creando en el país entorno a los baches, con el objetivo de que algunos sean declarados patrimonio nacional, y que al mismo tiempo se cree una institución que se encargue de su preservación y cuidado.
"Es que uno le coge cariño. Por ejemplo, éste para nosotros es como un hijo, pues lo hemos visto crecer desde que apenas era un pequeño hueco del tamaño de una moneda", declaró Graciela Pozo Hondo, quien es la presidente del Comité de Defensa de la Revolución de la cuadra donde se encuentra el bache homenajeado.
Asimismo dijo Pozo Hondo que "esta iniciativa que estamos impulsando, la de reconocer a nuestros baches más célebres como patrimonio nacional, ayudaría a la economía del país, pues serviría para ahorrar millones de pesos en concepto de mantenimiento de nuestras calles y carreteras, algo tan necesario en estos momentos difícil por los que atraviesa la economía del país".
Por último hay que señal que el nuevo movimiento por la preservación y cuidado de los baches ha influido en la conciencia de otros cubanos que han comenzado a hablar sobre la necesidad de protejer también los campos de marabú, al punto de que algunos ya se refieren a esta planta como "la más representativa de nuestra idiosincrasia", incluso están considerando presentarle un proyecto de ley al régimen para que la declare "Arbusto Nacional, o por lo menos, Patrimonio de Nuestra Campiña".