Por Lewis Balenciaga
Este domingo la Federación Internacional de Artes Marciales (FIDAM), reconoció al presidente puesto a dedo Miguel Díaz-Canel con el título de Gran Sensei del legendario arte marcial Sing-Gha-Do, "el camino de hacer más con menos siendo un impresentable".
Si bien este es un arte marcial muy antiguo, durante siglos estuvo prácticamente en el olvido, hasta que fue rescatado por la Unión Soviética, más precisamente durante el periodo de Iósif Stalin, tiempo en el que se expandió a otras regiones de Europa y Asia, principalmente a China, lugar de donde es oriundo, para más tarde, en 1959, legar a Cuba, y de ahí saltar a algunos países de América Latina y África.
Para la entrega de tal reconocimiento, el Consejo Directivo de la Federación Internacional de Artes Marciales, tuvo en cuenta principalmente el desempeño del presidente puesto a dedo al frente del régimen de los Castro, pero "también sus años de experiencia y práctica del Sing-Gha-Do, el cual comenzó a entrenar desde su niñez, porque pocos cultivadores de esta disciplina llevan tanto tiempo practicándola, y mucho menos con el esfuerzo y tiempo que le dedica el señor Díaz-Canel", señaló Emilio Bertran, presidente de la FIDAM.
Asimismo dijo que "la principal razón detrás de este reconocimiento es el amor que el pueblo cubano le tiene al señor Díaz-Canel, al punto de que todos le llaman singao, algo que nos llena de orgullo, porque muy pocos maestros del Sing-Gha-Do han conseguido semejante Hazaña".
Por su parte el puesto a dedo agradeció la distinción, y dedicó algunas palabras más a hablar sobre sus planes para continuar perfeccionando su técnica y llegar algún día a ser el mejor de todos los practicantes del Sing-Gha-Do, "principalmente porque éste arte marcial es de las cosas que más aprecio en la vida", expresó Díaz-Canel en la videoconferencia de la entrega de su reconocimiento.