El presidente puesto a dedo de
Cuba, Miguel Díaz-Canel, en reunión del Consejo de Ministros celebrada este
martes 29 de junio, volvió a negar que el país esté sufriendo una crisis alimentaria, y alegó que la escasez de alimentos responde a un programa de su
gobierno con el que busca mejorar la salud del pueblo cubano.
"Basta con que se atrase
la venta de pollo o de arroz para de inmediato ver a los enemigos de la
revolución comenzar a decir que tenemos una crisis alimentaria, cuando nosotros
sabemos que en nuestro país no hay tal crisis, y que la escasez no es tal
escasez, más bien es un programa bien diseñado por nuestro Ministerio de Salud
de la mano del Ministerio de la Industria Alimentaria y con todo el apoyo del
Ministerio de Comercio Interior, para hacer de nuestro pueblo el más saludable
del mundo", afirmó el puesto a dedo en la reunión.
De igual manera dijo que "gracias
a este programa, ideado por nuestro comandante Fidel y puesto en práctica por
vez primera en los años 90, hemos alcanzado un 92,28% de población libre de
colesterol, sin problema con los triglicéridos y sin problemas de azúcar y
obesidad, y eso hay que aplaudirlo, como uno de los mayores logros de la
revolución".
Por otro lado esgrimió que la disminución en la disponibilidad de alimentos a lo largo y ancho del país, "es algo que ayuda al gobierno revolucionario a tener más divisas en sectores estratégicos como el turismo y la construcción de nuevos hoteles, o en la defensa del país, con la adquisición de nuevas capacidades defensivas, principalmente para renovar el equipamiento de las Tropas Especiales y de la Seguridad del Estado, que se encuentran siempre en las principales líneas de combate de la patria revolucionaria.
Cabe destacar, que luego de terminada la reunión, todos los presentes pasaron a degustar un exuberante almuerzo en el comedor del tercer piso del Consejo de Estado, preparado para que cada uno pudiera ingerir al menos, un mínimo de 15 mil calorías.