Finge tener coronavirus para no dormir en la calle

 

Por Yannay Estrada

Yorgenis Arencibia en conversación con Ay, qué muela! explicó las razones que lo llevaron a fingir tener síntomas de COVID-19.

El pasado 7 de octubre, luego de una semana tratando de comprar dólares en la calle para adquirir leche para su hija de 6 años en las nuevas tiendas que operan en divisas, Yorgenis Arencibia fue expulsado de su casa por su mujer al considerarlo incapaz de poder atender a su familia.

"Imagínate, me sacó de la casa a las 5 de la tarde y yo lo único que tenía era un pan en el estómago, entonces me acordé de que a los sospechosos de COVID-19 los aíslan por 14 días con desayuno, almuerzo y comida garantizada, además de merienda, y al momento me fui corriendo para el policlínico".

Arencibia, quien fuera deportista algunos años atrás, contaba con llegar agitado al policlínico, con suficiente falta de aire, sudoroso y con la temperatura un tanto elevada producto del esfuerzo físico. El resultado fue que lo remitieron inmediatamente como sospechoso de ser positivo al nuevo coronavirus.

"Y entre una cosa y otra estuve casi una semana con techo, cama y tres comidas diarias, hasta que llegó el resultado de la prueba, y me dieron el alta. Lo mejor de todo es que logré comprar unos dólares en el centro de aislamiento, y cuando volví a la casa a mi mujer ya se le había pasado el berrinche. Ahora lo que no consigo es encontrar la leche para la niña. No hay leche en ninguna tienda. Si llego a saber eso antes, me hubiera ahorrado tanto problema, porque déjame decirte, la comida en el centro de aislamiento es gratis, sí, pero muy mala".