Por Helena Álvarez
El señor Frei Betto, el hombre que le enseñó a los cubanos a comer cascara de papa, cáscara de plátano y cáscara de huevo, ahora les enseñará a los cubanos a comer huesos de pollo para poder alcanzar la soberanía alimentaria.
Según Frei Betto los huesos de pollo son altamente alimenticios, ricos en proteínas y en minerales. También tienen mucho hierro, vitamina C, B, A y tiene muchos nutrientes. Dice Betto que comer huesos de pollos es bueno para la circulación, el estrés, pero sobre todo, para matar el hambre. Con el hueso del muslo de pollo que se come un cubano, tiene para tres días. ya no necesita probar más comida. Si quiere más comida luego de chuparse un rico hueso, es un avaricioso y un burgués capitalista.
Así que por esas cuestiones el gobierno cubano ha decidido comenzar a vender los huesos de pollos en cafeterías y establecimientos del estado para lograr la tan anhelada soberanía alimentaria.
Esta medida a sido tomada con mucha sorpresa por los cubanos, ya que estos, desde los tiempos de la crisis económica del periodo especial, comían huesos de pollos, y eso nunca les ha quitado el hambre, pero bueno, si Frei Betto lo dice, pues hay que confiar en él y en la revolución cubana que no dejará desamparada a su pueblo. Patría o muerte venceremos.