Por
Rodrigo Hernández
Las
Termoeléctricas cubanas ya llegaron a un punto de quiebre en el que no tienen
la capacidad para generar la electricidad necesaria, así que la página
oficialista Cubadebate anunció en el día de ayer que los apagones seguirán
sucediendo por todo el país y el problema no tendrá solución hasta que llegue
el próximo año.
Más
de 250 millones de dólares necesita el régimen cubano para poder echar a andar
las termoeléctricas. Ese no es tanto dinero, lo han tenido todo el tiempo, solo
que se lo han gastado en la construcción de hoteles, los viajes en jet privado
del hijo del primer ministro y las carteras de alta costura de Lis Cuesta.
Cubadebate
dejó claro que los apagones seguirán y a medida que avance el verano serán más
largo los cortes de electricidad, así que a más calor más apagón. Solo
permitirán unas horas de corriente para que carguen los teléfonos, cocinen y se
bañen, si hay agua, claro.
Todo
eso estará ocurriendo a lo largo y ancho del país menos en La Habana. Y es que
el régimen tiene miedo de que la capital se subleve así que ha decidido no
cortarle la electricidad y el día que le metan apagón le pedirán disculpas
públicamente en el noticiero. Más importante que no cortarles la luz a los
habaneros, está el problema de las tiendas en MLC.
El
régimen tiene miedo de que los productos de las tiendas se les echen a perder.
Para ellos es más importante que las laticas de melocotón encurtido, las
croquetas prodal y los espárragos conservados se mantengan frescos y con
corriente y prefieren que los cubanos de provincias sufran los apagones sí
total, nadie los mandó a ser comunistas.