Por Helena Álvarez
El locutor oficialista Yunior Smith Rodríguez quién hasta hace un par semanas fuera un represor de los mentirosos contra la oposición cubana, ahora está en la frontera entre México y Estados Unidos para pedir asilo político, alegando que era cómplice del régimen cubano porque sino le quitaban la javita de pollo y aceite.
El hombre está ahora en la frontera arrepintiéndose por lo que hizo en Cuba, él, que le deseó la muerte al opositor José Daniel Ferrer o a los muchachos del Movimiento San Isidro en el noticiero de la televisión cubana donde trabajaba.
Ahora dice que todo eso lo hizo porque era más importante la javita de pollo y aceite que le daban todos los meses. Lo curioso es que su esposa es norteamericana y le llenaba la tarjeta de MLC con 1000 dólares semanales para que no pasara trabajo, por eso nadie le cree ahora que se esté arrepintiendo.
Dice también que en el ICRT todos son unos mentirosos y que la próxima semana va a dar los nombres de todos los que quieren irse del país, porque aquello ya no da más. Además, la última jaba que le dieron no traía pollo, sino croquetas, "pero bueno algo es algo". Pero friendo las croquetas estas explotaron y le echaron a perder la cocina que había hecho nueva. Y por eso arrancó y se fue.