Por Helena Álvarez
Un niño cubano está esperando con desesperación que se apruebe el código de la familia para poder convertirse en un pececito, ya que sus padres no lo dejan pero cuando aprueben el nuevo código ya sus padres no tendrán poder sobre él y así podrá realizar su sueño.
El niño Yunieski Sotolongo, de 12 años de edad residente de la localidad de Palma Soriano en Santiago de Cuba, quiere ser un pececito desde hace mucho. Bueno, desde que vio los dibujos animados del pececito que no tenía color.
Cuenta que cuando vio esos muñes en el televisor se quedó sorprendido y tuvo una golpe de euforia, como cuando su amiguita Rosaida le dio un besito en segundo grado. Así que decidió convertirse en un pececito y le contó a sus padres, los cuales se quedaron horrorizados con aquello.
Por supuesto le dijeron un "no" rotundo, algo que el niño Yunieski no entendió y se pasó esos días llorando.
Pero el llanto acabó para el niño cuando se dio a conocer el nuevo código de la familia que quiere llevar a cabo el régimen para entretener a la gente como el matrimonio igualitario en la constitución de 2019 y Yunieski dijo ésta es la mía.
Así que ahora está esperando que se apruebe, para armar la perreta y que le quiten la patria potestad a sus padres y se la den a la abuela que esa sí lo complace en todo, lo que está esperando que pasen unos días para contarle lo de que se quiere convertir en un pececito no vaya a ser que a la abuela le de algo porque padece de la presión.