En la fotografía se pueden ver a los oficiales haciendo fila para el bañoPor Helena Álvarez
Desde bien temprano en horas de la madrugada, la seguridad del estado, la policía política del régimen castrista, movilizó a todos sus efectivos por si sucedía una gran manifestación a favor del artista Luis Manuel Otero Alcántara.
"Literalmente les entró cagalera, flojera en las patas, se pusieron chiquitos". Así nos lo cuenta una auxiliar de limpieza de una de las guarniciones del régimen castrista en el municipio del Vedado, en la Habana.
"Niña yo estaba muerta del sueño, y de repente me tocan la puerta muy duro. Y creí que era el capitán Ramón que siempre se escapa por la madrugada de su domicilio, y echa una canita al aire conmigo, mientras su esposa duerme. Pero no. Eran los oficiales de la unidad donde trabajo, que me vinieron a buscar en unos Jeeps con una pila de boinas negras de esas".
"Yo como quien no quiere la cosa, le pregunté a uno de los guajiritos que estaba pasando, y me dijo que habían sacado de San Isidro al revoltoso de Luis Manuel, y que ahora estaban muy preocupados por lo que pudiera ocurrir".
"Niña mira no escribas esto que te voy a decir, pero esos soldados se pasaron todo el viaje tirándose flatulencias. Incluso, tuvieron que parar en una calle oscura, porque dos agentes de la Seguridad se tuvieron que bajar urgente de su carro, y meterse en un matorral por la diarrea que tenían".
"Y cuando llegamos a la unidad, ay por tu vida, todos estaban haciendo fila para el baño. Incluso algunos salían, y volvían a hacer cola para entrar otra vez al baño".
Así nos contó para Ay, qué muela! esta valerosa auxiliar de limpieza, que dice que fue movilizada desde las cuatro de la mañana, ella, y todo el mundo, porque al parecer la Seguridad del Estado está corta de personal.
Cuenta que se ha pasado la madrugada y todo el día, rociando de espray toda la unidad, porque la peste a mierda es épica.