Este 8 de diciembre el régimen de los Castro organizó un
acto de repudio contra la conocidísima reportera de CiberCuba Noticias Iliana Hernández,
pero contrario a lo que esperaba la Seguridad del Estado, Iliana salió a
disfrutar de la actividad que le habían organizado.
Hay que señalar que la reportera fue una de los que protagonizaron la protesta que a finales de noviembre desarrollaron algunos intelectuales, activistas y artistas, en la sede del Movimiento San Isidro, exigiendo la libertad del rapero Denis Solis, encarcelado desde el día 9 de ese mes por hacer uso de la libertad de expresión.
Uno de nuestros reporteros que se encontraba en el lugar, señaló
que a simple vista los rostros de los que participaron en el mitin de repudio eran
los de hombres y mujeres que han pasado hambre durante los últimos meses, (cosa
que es comprensible debido a profunda crisis alimentaria que vive el país), algo
que motivó a Iliana, una mujer que tiene un corazón que no le cabe en el pecho,
y esto es mucho decir si se tienen en cuentas su proporciones, a salir con unas
libras de arroz para alimentar a los manifestantes.
"Mi idea era darle arroz a todos, pero como eran
muchos, al momento me di cuenta que eso iba a ser imposible, al menos que se lo tirara crudo y que cada cual agarrara lo que pudiera", explicó Iliana en declaraciones
para Ay, qué muela! y agregó: "También quería entregarles un poco a cada uno en las manos, pero mi madre no quiso abrirme la reja de la casa, y lo único
que pude hacer fue tirárselos".
Pero inmediatamente los miembros de la Seguridad del Estado impidieron
que la gente se agachara a recoger los granos de arroz.
"Tengan paciencia, que para ustedes tenemos una merienda
reforzada preparada para cuando termine esto", gritaban los agentes de la Seguridad
del Estado al tiempo que aguantaban a los que intentaban agacharse.
Lo sorprendente fue que en cuanto el mitin terminó y los segurozos
se llevaron a su tropa de famélicos repudiadores, nuestro reportero vi cómo la
presidenta del Comité de Defensa de la Revolución (CDR) salió a toda
velocidad con una escoba y un recogedor, y recogió todos los granos de arroz.
"No es lo que usted está pensado", le dijo a nuestro reporte, "son para unos perritos que tengo en la casa".