Los cinco espías se comen la bandera y terminan con diarrea crónica

 

Por Charly Menéndez Castillo

Este 17 de diciembre fue noticia que los cinco espías cubanos celebraron un año más de que, gracias a un indulto, o a un intercambio de prisioneros, los tres de ellos que permanecían en los Estados Unidos disfrutando de las comodidades de ese país, regresaran a Cuba.

La noticia en sí fue una imagen que circuló por redes sociales donde se les ve comiéndose un kake de 10 kg adornado con la forma de la bandera cubana, a pesar de que en el 2019 el régimen impuso en el país a través de una ley, la prohibición de ese tipo de uso para ese símbolo patrio.

La noticia de hoy, según médicos que atienden a los cinco en el Centro de Investigaciones Médicas Quirúrgicas, más conocido como Hospital CIMEQ, es que todos presentan un cuadro muy agudo de diarrea crónica, que si bien hasta este momento no han manifestado evidencias de deshidratación, los médicos no han podido hacer que dejen de defecar.

"Y lo peor del caso no es la incontinencia fecal que tiene a todo el personal en constante movimiento, ni la tremenda peste que emanan las excrecencias; lo que más nos preocupa es que la diaria es multicolor, con los colores de la bandera, y por eso nadie del hospital se ha atrevido a deshacerse de ella, por temor a que el que lo haga sea acusado de violar la dichosa ley esa de los símbolos patrios, y termine hasta perdiendo su título", comentó uno de los médicos que atienden a los cinco espías, y que por razones obvias de seguridad, prefirió el anonimato.