Adán Perugorria: La Diva de Leningrado
Por RodrigoHernández
Hace
unos días el musico de K Pop Adán Perugorria, amenazó con tirarle unos golpes
al artista plástico Hamlet Labastida.
El integrante y fundador del grupo de pop coreano Nube Roja, se explotó en Facebook después de leer un artículo de la revista Mujercitos, donde presuntamente se mencionaba a su madre. Entonces escribió por Messenger a Hamlet:
"Para
que sepas, todos los que están con esa revista, los vamos a eliminar, al final
ninguno hace absolutamente nada, solamente hablar mierda por su frustración
como artistas y como personas, si los veo en San Isidro lo van a lamentar, si
los veo en Gibara lo van a lamentar y si me los encuentro en algún lugar
también lo lamentaran, ya se quien es cada persona que tiene que ver con eso,
tengo fotos y nombres…"
Y ahí
lo dejamos porque también citó a Lenin, y este redactor no tolera a los
comunistas, y además es sabido el historial de relación amorosa que tiene Adán Perugorria
con la Seguridad del Estado cubano.
Y es
que la Diva de Leningrado, como popularmente se le conoce, siempre ha nadado en
las aguas de la conveniencia para poder dar sus concierticos en el barrio de
San Isidro.
Adán se
la ha pasado desde siempre censurando y cancelando exposiciones en su galería
Gorria, bueno, la galería del padre, porque Adán, la Diva, solo es dueña del
teléfono en el que recibe órdenes de la Seguridad del Estado, y cada vez que se
le atora un peo a ese órgano represivo, allá va a Adán a resolver esa cuestión
como un sirviente al que el amo le grita "mami ven límpiame aquí".
Adán,
la Diva, habla como si el barrio fuera de él, cuando todos sabemos que el
Movimiento San Isidro es el que le da vida y folklor a ese barrio empobrecido
por tantos años de dictadura. Adán es un inflador.
Y si no
me creen, lean el artículo "Rojo como la nube" de la revista
Mujercitos, donde el escritor Mario Poppins (amo ese seudónimo) expone con
lucidez ancestral y cabrona: "Nube Roja es la más reciente y a la vez más
exquisita incorporación del Escuadrón suicida de la anti música (o no-música) cubana".
Con
razón la Adán, el Diva de un metro y algo con cara de bobín se frustró.
Pobrecito.