Íntimas en Cuba serán recicladas y sus secreciones extraídas para alimento animal


Desde inicios de año, el desabastecimiento de almohadillas sanitarias en Cuba hace que más de tres millones de mujeres que necesitan este producto recurran al uso de algodones y trapos como solución para su clico menstrual. 

Ante esta grave situación higiénica, el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) determinó que a partir del próximo mes de octubre, cada mujer que compre las íntimas normadas tendrá que, luego de haberlas usado, entregarlas en las farmacias donde las adquirieron para que sean recogidas por la misma empresa que las produce (MATHISA). 

Esta inusual medida contará con una segunda y una tercera parte. Las almohadillas pasarán de ser desechables, a reempaquetadas luego de pasar por un proceso de esterilización, para volver a distribuirse por todo el país. Los restos de sangre, secreciones y fluidos de estas almohadillas serán extraídos y enviados a una dependencia del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL), donde serán procesados con los otros ingredientes del pienso líquido dado a los cerdos y así fortalecer su dieta.

La noticia, que fue difundida hace unos días por el sitio web Cubadebate y luego desmontada de esa plataforma, ha generado disímiles comentarios en contra, pero sobre todo a favor de la medida.

“Que sepan nuestras féminas -aseguró una funcionaria de MATHISA- que esta decisión es un aporte a la sustitución de materias primas. Además, cada mujer que entregue 10 o más paquetes de íntimas, recibirá al finalizar el año un combo de almohadillas de exportación, una botella de aceite y un paquete de embutidos”.