Por Malpa López
Producto de la crisis económica que reina en el país, consecuencia directa de la gran corrupción que impera entre los altos dirigentes, desde hace algunos meses el régimen busca nuevas alternativas para ingresar dinero a sus arcas, y lo hace esta vez lanzando lo que han denominado “Operación Batalla”.
Según confirmó en exclusiva a este medio un trabajador del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), “la negociación está asociada a brindar ayuda al aguerrido y solidario pueblo de Corea del Norte”.
En una reunión realizada en el pantry de la institución en horario de la madrugada de hoy, el Presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, la Directora de Zoonosis, Jusayma González, el ex espía, Héroe de la República y Presidente del ICAP, Fernando González y el embajador de la República Norcoreana en la Isla, Pak Chang-yul, firmaron un contrato con el objetivo de venderle a ese hermano pueblo un primer lote de 100000 canes por un valor aproximado a los 6 millones de dólares.
“Ha sido un pedido urgente del líder Kim Jong-un -comentó el empleado-. En julio pasado él calificó a estas mascotas como una tendencia contaminada por la ideología burguesa, por lo que tomó la medida de confiscar todos los perros de sus ciudadanos para proteger al país contra la decadencia capitalista”.
La realidad en el estado más hermético del mundo se pierde en todo momento, pero algunos diarios como La Vanguardia, de México y ABC, de España, confirman que se trata de una estrategia gubernamental para paliar la hambruna de los cerca de 20 millones de norcoreanos, pero no exactamente la de la población, sino la de los altos cargos, a los que incluso también les han quitado sus mascotas.
“Necesitan millones de perros para alimentar a su ejército, confirmó la fuente, que a fin de cuentas representa casi la totalidad de ellos; viven todo el tiempo en constante vigilia revolucionaria contra el imperialismo, al igual que nosotros”.
A las preguntas de Ay, que muela! sobre cómo se le ocurrió al gobierno cubano esta nueva negociación a espaldas del pueblo, las consecuencias que traerá la decisión en la sociedad cubana en medio de una lucha por una Ley de Protección Animal con fecha de legislación para noviembre próximo, y la idea del nombre de la Operación, el pantrista explicó:
“Solo les puedo decir, de buena tinta, que al final ganamos todos, ya no habrán perros callejeros en ninguna calle de Cuba, los han recogido y también han hecho lo mismo en los centros de acogidas no estatales. Habrá un segundo y un tercer lote porque Zoonosis ya ha puesto a parir a muchas perras en sus criaderos. Yo mismo entregué a mi perro, un salchicha de 2 años y me dieron un diploma. En cuanto al pueblo, nosotros apoyamos cada medida que toman nuestros abnegados dirigentes, es un sacrificio más y la Ley, ¡por supuesto que será aprobada! Con relación al nombre 'Batalla', se trata de una analogía con un animado cubano donde un perro con ese nombre detiene un tren antes de que cruce un puente destruido por la crecida de un río. ¿Qué les parece?”