Por
Rodrigo Hernández
Hace
unos días la famosa actriz y activista Angelina Jolie estuvo de visita en Cuba
y antes de regresar a los Estados Unidos, se pasó una semana en el municipio de
Marianao creyéndose lo que decían las redes sociales y las consecuencias fueron
terribles.
“Me
estafaron periodista” así inició la entrevista la actriz que comenzó su carrera
como modelo y que luego le dio vida a los personajes de Tom Ryder y Maléfica.
“Estuve una semana en Marianao porque vi el reportaje que pusieron en el Canal
Habana. Imagina que yo estaba disfrutando en Cayo Santa María con un cubano
hermoso, pero fui un momento a la habitación a buscar crema antisolar y el
televisor estaba puesto. Lo único que recuerdo fue “Aquí todo está rico” y
enseguida llamé un taxi y salí para la Habana”, comenta la actriz, que fue a
parar a una clínica privada luego de que regresara de su viaje de La Habana.
Al
parecer se quedó hipnotizada con el video que por estos días ha estado
circulando en el que una pareja de cubanos dejó plasmado que el Municipio
Marianao es el mejor lugar para vivir en Cuba ya que allí no hay colas, nunca
falta el pollo, no se va la luz eléctrica y todo está rico. Angelina se creyó
ese cuento y se pasó una semana en ese lugar que le pareció 62 años.
“Imagina periodista que me alquilaron en un cuartico con techo de zing en medio de un solar que no tenía ni baño, ni lavamanos, bueno, es que no tenía cocina. Por poco me da algo. Al segundo día salí a comprar víveres y hubo una bronca en una cola que se cayeron a cuchilladas y me desmayé, porque yo no puedo ver sangre. Para colmo en el consultorio no había corriente ni alcohol para despabilarme. Fui a una cafetería a comprar pizzas y cuando ya me había comido la mitad del hambre que tenía, una señora me dijo que estaban hechas con condón pero que sabían ricas por el sazón completo que le echaban. Allí mismo vomité todo. Me dijeron que comprara croquetas y cuando salí a buscarlas dos muchachos me pasaron corriendo por al lado y me robaron la cartera y cayéndoles atrás me tropecé y caí dentro de una fosa. Para colmo las croquetas me explotaron en la mismísima cara. Horrible periodista, horrible”, confesó la actriz entre lágrimas, la que tendrá que pasarse varias semanas en la clínica para poder recuperarse de la pesadilla que vivió.