Por Rodrigo Hernández
Dice Marino Murillo que, a partir del primero de enero del próximo año, y teniendo en cuenta, que todo lo que ordenó ahora está desordenado, lo va a volver a ordenar para tener un país más desordenado.
El actual presidente de TabaCuba ya dejó la isla sin cigarros, y al parecer no le bastó con lo desordenado que ha dejado al país, sino que quiere seguir desordenándolo, porque así los cubanos se interesan más en las colas y el pollo y se olvidan del desorden que ha creado Murillo.
Dice Marino que el ordenamiento es su gran obra maestra, pero que, para que se cumpla a cabalidad, tiene que volver a estar al frente de la economía del país para desordenarlo bien de verdad.
Que lo de ahora fue solo terapia de choque y dice que los cubanos están listos para el verdadero desordenamiento.
Así que a partir del 2022 va a implementar un decreto ley para declarar el ordenamiento patrimonio del socialismo cubano, y que pueda seguir usándose durante todo el próximo año para seguir desordenando todo.
Porque el desordenamiento ha sido espectacular para el ordenamiento del comunismo, pero no para el ordenamiento de la gente, y eso le satisface mucho.
¿Ustedes entendieron? Pues no se preocupen, nosotros tampoco.