Por Helena Álvarez
El régimen cubano ha comenzado a vender palos de guayaba entre sus seguidores revolucionarios, porque tienen muchos deseos sexuales y no son satisfechos por sus parejas, así que tienen que recorrer a los palos de guayabas para saciar el apetito.
La venta comenzó ayer en la provincia de Matanzas, donde se les vio a varios revolucionarios felices con los palos en las manos, al parecer al momento de hacerse la foto, todavía no los habían usado, porque no tenían muy buena cara que digamos.
Y es que el apetito sexual de los revolucionarios es tan grande, que desde el mismo año 1959 han tenido que usar este tipo de prácticas poco ortodoxas, para saciar el fogaje que les deja la revolución.
Los revolucionarios siempre andan bien calentones.
Y como les da pena, camuflajean estos actos de lujuria con otras actividades como la preparación para la defensa. En realidad, el día de la defensa es el día que tienen los revolucionarios para hacer una gran orgía en nombre de la revolución.
Así reivindican el carácter socialista de la nación, teniendo sexo unos con otros, hombres con hombres, mujeres con mujeres, solo que desde que comenzó la pandemia no han podido hacerlo.
Según el jefe de la guardia civil de Matanzas, "la venta de palos de guayaba llega a la hora buena, porque la revolución necesita estar relajada ante tanto ataque del imperialismo", afirmó.
A la pregunta de porque palos de guayaba y no de mango respondió:
"Es que los palos de guayaba son grandes, duros, firmes, robustos. Todo lo que uno necesita para satisfacer sus deseos sexuales como nos lo indica la revolución. A Cuba ponle un buen palo", concluyó.