Anyell
Valdes Cruz es una de los que se acuartelaron el pasado mes de noviembre en la
sede del movimiento San Isidro como acto de protesta exigiendo la excarcelación
del joven rapero contestatario Denis Solis, condenado injustamente a 8 meses de
prisión.
"Mire
periodista, a mí me llevaron obligada. Me dijeron que si no iba me botarían del
trabajo. ¿Tú te imaginas que me boten del trabajo? ¿De dónde saco dinero yo?
Imagínese, yo vivo sola con mi hija. Mi esposo nos dejó en el 94, se fue en una
balsa cuando la niña tenía un año. Desde ese entonces me las he visto negras,
porque tenía que buscar las cosas para la niña, y también comprar la jaba para
llevarle comida los domingos a mi hermano, que estaba preso por tenencia ilegal
de divisas.
"Imagínese, yo sola con una niña de un año en esa época que la cosa estaba fea. Tremenda hambre que pasamos. Tuve que ponerme a inventar, y yo soy revolucionaria fíjese. Iba a Bejucal por la tarde a buscar cocos, y me pasaba la madrugada haciendo coquitos, para después irme con la niña para su escuela, y venderlos ahí. Y aquello me rompía el corazón porque muchas veces los niños no tenían dinero para comprarlos.
"Mi
vida ha sido muy dura, y ahora que gracias a la revolución yo tengo un
trabajito decente, ¿usted cree que yo voy a perder eso por no estar una hora
parada frente a una casa gritando barbaridades?
"Hasta
usted lo haría. Bueno, por la cara que me pone sé que no lo haría. Usted se ve
que sí ama a este país. Pero le digo que todos esos que van a los actos de
repudio, no creen en la revolución. Van obligados, o peor, van porque son unos
descarados, porque los del CDR les dan una jabita con pollo, aceite,
detergente, cuatro jabones, un tubo de pasta perla, y una colcha.
"A
mí la verdad me mató escuchar a los niños llorando dentro de la casa, y cuando
le echaron algo al perrito y vi que se cayó, por poco me da un soponcio, porque
con los perritos sí que no.
"¡Y
como pensé en mi hija cuando estaba ahí! Total, uno va a esos actos a gritar
cosas que ni una misma respeta, porque cuando se murió el Fifo (Fidel Castro)
yo fui la primera que hice una fiesta para celebrar.
"Yo
la verdad agradezco que me hayan permitido decir unas palabras, para
desahogarme, porque por muy revolucionaria que yo sea, esta mierda no da más. Y
me siento muy apenada de participar en esas cosas de repudio que total, ni
nosotros podemos comprar en tiendas MLC.
"Pero ya tú sabes, esto es Cuba, es lo que hay. Y como te digo una cosa te digo otra, yo soy revolucionaria pero no creo en el patria o muerte, además, desde que salió la canción esa, mi hija no deja de ponerla en la casa. Y ese Yotuel está rico cantidad. Ay si yo me empatara con un hombre así, ahí sí que mando la revolución bien lejos".