Por Helena Álvarez
Michel estaba de vacaciones por Alemania con dinero de la MTT, pero en la noche de ayer apagó su teléfono y cuando sus compañeros fueron a su habitación, la encontraron vacía. El tipo se fugó.
Al parecer el locutor oficialista del programa Confilo, Michel E. Torres Corona, fue seducido por los cantos de sirena y las hamburguesas Burgen King. El hombre no pudo resistirse al capitalismo y traicionó a la patria.
Desde hacía días sus compañeros habían notado que Michel estaba como loco, con los ojos muy abiertos y comiéndolo todo. Incluso el agente de la Seguridad del Estado que iba en la delegación le hizo la visita porque Michel se emborrachó en un bar y se puso a gritar arriba de una mesa: ¡Yo no soy Fidel y Raúl mariquita! Michel lo negó todo por supuesto. Se cuenta que se arrodilló a los pies del agente para besárselos y le decía ¡Yo soy Fidel y Raúl es Raúl!
Pero ayer en la noche el hombre abandonó a la revolución.
Por el momento la prensa oficialista no ha dicho nada, pero ya Michel Corona, no se encuentra entre nosotros. Según una fuente anónima, Michel fue visto saliendo de su hotel por la puerta de atrás y se montó en un auto negro que iba rumbo a la embajada americana en Alemania. Es probable que en par de días aparezca en Miami tomando café en el Versalles.
Estaremos pendientes.